Dichos y refranes de uso regional
En los cuestionarios y entrevistas, los informantes de Córdoba Capital enumeraron espontáneamente dichos y refranes que se usan en la región. Entre ellos, hemos elegido algunos para mostrar de qué manera el entorno cultural influye en la forma de comunicar metafóricamente actitudes y costumbres de la vida cotidiana.
Alzado como primer nieto (informante CORD_H13_004)
Este dicho compara el estado de excitación sexual con el hecho de que, en general, al primer nieto se lo alza –se lo levanta en brazos- más que a los otros.
Tomar hasta el agua de los poios (informante CORD_H21_002)
Este dicho hace referencia al exceso en el consumo de alcohol por parte de aquellas personas que beben todo lo que encuentran a su alcance. El término “poios” es una expresión coloquial y dialectal para designar al “pollo” en Córdoba Capital. Es una variante del dicho “Tomarse hasta el agua de los floreros”.
Le falta la línea de los cuatro (informante CORD_H23_005)
Este dicho hace referencia a la línea defensiva que se utiliza en el juego de fútbol, compuesta por cuatro jugadores: dos laterales y dos centrales. La expresión designa a una persona que no está totalmente cuerda, que tiene dificultades cognitivas o escaso nivel de discernimiento. Es una variante de los dichos: “Le faltan caramelos en el frasco”; “No tiene los patitos en fila”; “Le faltan jugadores” o “Le falta un tornillo”.
No tirar manteca al techo (informante CORD_M21_008)
Esta expresión se atribuye a Martín Máximo Pablo de Álzaga Unzué (alias “Macoco”), un automovilista argentino millonario que figuró en el libro Guiness no solo por su marca establecida en 1924 por haber ganado el Gran Prix de Marsella, sino también por haber sido el argentino que más dinero gastó en su vida. “Macoco” invitaba frecuentemente a sus amigos a comer al famoso restaurante “Maxim’s” de París y una noche colocó manteca en un tenedor para tratar de embocarle a los senos de las mujeres pintadas en el célebre techo del lugar e inmediatamente se realizó un torneo para tirar manteca al techo utilizando los cubiertos como catapultas. Esta costumbre se generalizó también entre los “niños bien” de la alta sociedad porteña que gastaban fortunas en los cabarés y se divertían mirando caer a las bailarinas que pisaban la manteca desparramada por el piso. La expresión hace referencia a evitar el exceso en los gastos.
Hecha la ley, hecha la trampa (informante CORD_H13_004)
La explicación de este dicho de tono sentencioso habría surgido de un texto escrito por Fosco Maraini (1912-2004) en su libro Secreto Tibet. En él se cuenta que unos monjes japoneses tenían prohibido comer otra carne que no fuera de animales marinos, cuya obtención era dificultosa. Por esta razón, decidieron alimentarse con cerdos a los que denominaron ballenas silvestres. De ese modo, lograron respetar la imposición monástica. Así se originaría esta expresión que hace referencia a las estrategias empleadas para evitar la sanción por no acatar una norma.
Tener un dios aparte (informante CORD_H21_002)
Este dicho hace referencia a aquellas personas con tanta buena suerte que salen airosas de situaciones de mucho peligro. Según la expresión, esto se explicaría porque tienen un dios dedicado a protegerlas exclusivamente.