Articulación de < r > y < rr >

El grafema < r > y el dígrafo < rr > en español dan lugar a la existencia de dos consonantes róticas: [ɾ] rótica alveolar percusiva  , y [r] rótica alveolar vibrante sin que exista una correspondencia unívoca entre estos grafemas y los sonidos mencionados ([ɾ], [r]).

En muchas regiones de América, incluida Argentina, y dentro de ésta, Córdoba, se produce un proceso de asibilación de la erre, esto es [r] > [ř]. La pronunciación asibilada [ř] muestra las características de una fricativa de frecuencias altas, sin obstrucciones de la punta de la lengua en la zona alveolar. La erre asibilada [ř] suele presentar una realización ensordecida además de la asibilada sonora.

El fenómeno de asibilación suele atribuirse a distintas acciones de sustrato fonético operando desde las lenguas de los pueblos originarios de América en contacto con el español que se escucha, particularmente, en zonas rurales. 

Los grafemas < r > y < rr > en el habla de Córdoba capital

En el habla de Córdoba capital se perciben las tres realizaciones mencionadas: [ɾ], [r] y [ř]. La primera, [ɾ], como sucede obligatoriamente en el español, se deja oír en todos los hablantes cuando < r > se encuentra entre vocales . Asimismo, se la percibe cuando está precedida o seguida de consonante y en posición final , aunque en este último caso suele estar ausente o elidida [ø] .

Pronunciación de los grafemas < r > y < rr > en posición inicial y entre vocales, respectivamente

En cuanto a las otras dos variantes, [r] y [ř], los Gráficos 1 y 2, muestran que, en los contextos < r > en posición inicial seguida de vocal y < rr > entre vocales, la frecuencia de uso de la vibrante [r] es notablemente superior a la de la asibilada [ř] .
Los resultados que muestra el Gráfico 3, que presenta las frecuencias en la realización de los grafemas < r > y < rr > en los dos contextos anteriores según el género, sugieren un uso generalizado de la vibrante [r] en el habla cordobesa capitalina, tanto en los hombres como en las mujeres , con una frecuencia levemente superior en las informantes mujeres. La frecuencia de uso de la asibilada [ř], aunque baja en general, es levemente superior en los hablantes hombres que en las mujeres .
Si se toma en cuenta el nivel de escolarización de los informantes, el Gráfico 4, que presenta en forma conjunta las realizaciones de los contextos de los Gráficos 1 y 2, muestra una elevada frecuencia de uso de la vibrante [r] entre quienes pertenecen al grupo de escolaridad superior y una frecuencia menor, pero importante, entre los informantes de escolaridad básica. En cuanto al uso de la variante asibilada [ř], aunque ambos grupos la utilizan, los informantes con escolaridad básica la emplean con una frecuencia más elevada .

Respecto de la pronunciación de los grafemas < r > y < rr > según el grupo etario, el Gráfico 5, que presenta las frecuencias en la realización de estos grafemas en los contextos 1 y 2, muestra un uso casi generalizado de la vibrante [r], tendencia que es más notoria en los informantes pertenecientes a la generación entrante y que disminuye gradualmente en las generaciones actuante y saliente. El uso de la asibilada [ř] es casi inexistente en la generación entrante y aumenta progresivamente en las generaciones actuante y saliente.

Pronunciación del grafema < r > delante de pausa

En el caso de < r > en posición final de palabra seguida de pausa, la muestra registra una mayor articulación de [ɾ]  y muy baja frecuencia de elisión [ø]  (Gráfico 6).
El gráfico 7, < r > seguida de pausa según el género, muestra que, aunque la tendencia es similar a la del Gráfico 6, en los informantes hombres se percibe un mayor uso de elisión [ø]    que en las informantes mujeres.

Pronunciación de < r > en los contextos < l, n, s > + < r >

Respecto de la pronunciación de < r > en los contextos < l, n, s > + < r >, aunque de muy escasa presencia en las muestras recolectadas, el Gráfico 8 muestra que existe un uso casi generalizado de la vibrante [r] con muy baja frecuencia de la asibilada [ř] .

ȝi׬

  • Resulta interesante señalar que algunos informantes emplean dos o más pronunciaciones del grafema < r >. Por ejemplo, CORD_M21_008 (mujer de la generación actuante y escolaridad básica), utiliza la vibrante [r] y la asibilada [ř] para la misma palabra . Esta informante emplea, además, una variante post-alveolar, levemente retrofleja [ṟ] y, en numerosos casos, la elisión [Ø].

  • Muy rica la comida que hace. Esas comidas de antes. Muy rica. Y bueno, y hace escalope, hace carne al horno, a veces, tartas, eh, hace mucha verdura, muchas ensaladas, las combina a las ve* a las ensaladas. No les hecha, no hace ensalada sol*, no le echa sal* eh, ensalada. Les pone queso, aceituna… Hace comida muy rica; y muy buenas las comidas que hace.

    Sí, todas las comidas que hace eh, hac* eh, son sabrosas. Tiene mucho sabor la comida de ella.

    Y porque ella las condimenta, aparte a ella le gusta, le gusta la cocina. Porque una señora de la edad de ella, hay personas que ya no cocinan. Pero ella cocina porque está bien y aparte hace muy rica las comidas. Yo estoy chocha con las comidas que como ahí porque es muy rica.